Cada uno de los pasos que vayas a tomar a la hora de decidir en cuanto a una oportunidad de inversión en compra de acciones, marcará lo favorable o no que pueda ser.
Esto no quita que la inestabilidad del mercado pueda afectarla, así como la rentabilidad diaria que tenga.
Pero existen pasos a seguir para minimizar los riesgos y puedas alcanzar tus objetivos de inversión.
Tabla de contenidos
¿Cómo funciona la bolsa de valores?
Es el sitio donde diariamente se compran y venden acciones. Es una vía de financiación de una empresa, así como para los inversionistas, ya que pueden ver las liquidaciones casi al instante.
Las acciones son los títulos de propiedad de una parte de una empresa, donde su precio puede estar expuesto a subir o bajar. Una vez que tengas acciones en una compañía, te conviertes en accionista y tienes derechos.
De la misma forma que ocurre con el mercado físico, tiene horarios de apertura y de cierre.
Aspectos importantes que debes tener presentes para comprar acciones
Antes de invertir tu dinero en alguna acción, ten en cuenta algunos parámetros.
El tiempo adecuado para comprar
El universo de las inversiones es muy amplio y existe un número bien grande de acciones por las que puedes apostar. Pero a la hora de analizar por cual te vas a decidir, debes establecer un orden de acuerdo a tus preferencias temporales de inversión.
Establece un horizonte temporal para las inversiones
Una buena idea es realizar una lista. Dicha lista no será más que una organización acorde con tus objetivos de las acciones. Primeramente, establece un horizonte temporal. Esto es un lapso de tiempo en el cual esperas que tus acciones rindan la parte que has calculado.
Luego denota con puntos del 1 al 5 las acciones. El máximo de puntuación o 5 es para aquella que si tiene el máximo rendimiento esperado en ese horizonte temporal. Así consecutivamente con todas, en consecuencia con tus objetivos de inversión.
Medir tu rendimiento en las rentabilidades
El rendimiento que esperas puede ser medido por la rentabilidad por dividendo. Pero para ello debes estudiar en el espacio en que te encuentras. Esto es el análisis del contexto económico en donde se desarrollan tus acciones.
Por ejemplo, puede existir la posibilidad de que determinada inversión te genere un buen dividendo, pero de aquí a un tiempo requiera mayores capitales, por lo que es posible que llegado ese momento no pueda seguir sosteniendo toda esa base de inversores y se vea obligada a reducir los dividendos.
Todos estos aspectos debes evaluarlos antes de comprar acciones.
La seguridad en tus inversiones
A la hora de hablar de la seguridad que pueda tener una inversión debes manejar dos términos que se relacionan mucho con ella. Estos son la fuerza financiera y la volatilidad o riesgo.
En dependencia de como seas como inversor y de cómo puedas soportar los altibajos del mercado, debes seleccionar la volatilidad que deseas para tus acciones.
Anota tus posibilidades de ganar
De la misma forma que hiciste a la hora de analizar el tiempo, en este caso debes darle el número 1 a aquellas acciones que ofrecen mayor riesgo y que son desfavorables para tu perfil de inversor. El 5 es para las acciones que son más favorables para ti, todas ellas deben estar enfocadas en cumplir tus objetivos financieros.
Un ejemplo de los objetivos a lograr antes de invertir
Los objetivos pueden variar en dependencia de los inversores, por esto te digo que es uno de los aspectos más importantes cuando vas a elegir una acción.
Un ejemplo:
Imagina que quieres invertir con 1 año de horizonte temporal para pagar los estudios de tus hijos o comprar un determinado artículo. Por esta razón eliges una volatilidad alta. Cuando llega el momento puede que estés perdiendo dinero, debido a un determinado movimiento del mercado.
Aquí no estás cumpliendo con tus objetivos, por haber elegido mal el tipo de seguridad para tus inversiones.
Como una recomendación, aun si eres de los inversores más agresivos, debes descartar todas aquellas acciones que califiques con una puntuación de 4 o 5 puntos, por motivos de seguridad.
El potencial inversionista
El potencial de la inversión debe ser mirado con respecto al horizonte temporal que determines. A la hora de establecerlo es importante que tengas en cuenta el benchmark o punto de referencia.
Por ejemplo, si tienes la idea de comprar una acción en la bolsa de Nueva York, no puedes elegir un punto de referencia con ninguna bolsa europea. En tal caso tu inversión está mal fundamentada y no tendrá los resultados esperados.
Para librarte de esos malos cálculos es importante que establezcas una media entre los valores más altos y los más bajos del horizonte temporal. Pero si haces esto debes hacerlos tanto de la empresa, como del punto de referencia. Todo ello antes de tomar la decisión de comprar ninguna acción.
La consistencia para un desarrollo anual adecuado
Para analizar este punto es esencial que veas los desarrollos anuales de:
- Los cambios en los ingresos.
- El beneficio neto.
- Los flujos de caja en los últimos tiempos.
- Las proyecciones futuras para los próximos 3 a 5 años.
Mediante este análisis financiero, sabrás con exactitud cómo creció en los últimos años y si las estimaciones de crecimiento en el futuro son positivas o negativas.
Cuando hagas este análisis podrás ver la consistencia de los resultados. En caso de no tenerla te darás cuenta de las grandes variaciones en el tiempo que ha tenido y que puede tener comprar esas acciones.
Crecimiento fuerte de la empresa
Es clave comprobar si el crecimiento de una empresa es fuerte o no. ¿Cómo veo esto? Es fácil. Es fuerte si los crecimientos de la empresa son de por lo menos un 10% al año. Sólo entonces deberías pensarte comprar dicha acción.
También si la consistencia de ella ha sido estable, sin grandes variaciones, puede ser una razón para adquirir la acción, aun si el crecimiento no supera el 10%.
Un análisis de la situación actual del mercado
Antes de comprar una acción debes conocer la situación en el que se encuentra el sector. Auxíliate de un analista.
Ellos te dan:
- Informes de mercado con los análisis más importantes que afectan una determinada industria.
- Eventos que pueden afectar de manera positiva o negativa la compra de una acción.
- Beneficios o proyección de una ganancia de la industria.
La diversificación de tu cartera
Este aspecto es relevante si tienes más de 1 acción en tu cartera.
Consejo de los expertos a seguir para minimizar el riesgo
La teoría dice que debes tener al menos 5 acciones que tengan una correlación baja, menor de 0.5. solo en este caso la diversificación hace su efecto y todas las acciones de tu cartera tienen un riesgo bajo, en comparación al que tendrían por separado.
Para esto debes evitar comprar acciones en el mismo sector o industria. Un ejemplo claro es comprar acciones en dos bancos diferentes.
La compra de acciones en la bolsa de valores puede ser la salida de tus apuros financieros. Pero para ello debes poseer un conocimiento básico de cómo funciona el mercado financiero, a pesar que la mayoría de las decisiones puedan ser tomadas por un corredor de acciones.
Para ello te voy a dar un grupo de consejos para comprar acciones.
Consejos para comprar acciones
No es necesario que seas un experto en el tema, aunque para muchos es un elemento muy riesgoso. Lo cierto es que cualquier persona que domine algunos saberes esenciales puede hacer inversiones en la bolsa a través de su broker.
Conoce tu perfil como inversionista
Cada persona que está dispuesta a invertir en la compra de acciones tiene un perfil determinado. Esto se ve de acuerdo al nivel de riesgo y a la rentabilidad que estás dispuesto a tomar. Existen 3 tipos de perfiles:
- Conservador: son los que no les gusta tomar riesgos en sus inversiones. Por este motivo no invierten en acciones sino en la renta fija. Estos, aunque no tienen mucha rentabilidad, dan una ganancia segura y que se puede conocer con antelación.
- Moderado: asumen cierto tipo de margen de riesgo, pero coloca la mayor parte de su capital en una renta fija, aunque una parte es variable al igual que las acciones con el fin de aumentar la rentabilidad. Pueden existir ciertas proporciones, aunque lo general es que no se aleje mucho de la zona de rentabilidad segura.
- Agresivo: son aquellos que pueden tener un alto nivel de riesgo y también una alta rentabilidad. Colocan un porcentaje importante de su capital en una renta variable. Pero su liquidez es alta y con proyecciones de obtener mejores ganancias.
Escoge al broker correcto
Los broker o corredores de bolsas, son los que sirven de mediación por los cuales puedes tener acceso al mercado de valores. Existen muchos, por lo cual requiere de tu parte una investigación previa para conocer cuáles son los mejores y te ofrezcan mayor confianza.
Muchos de ellos tienen en su perfil los resultados que se comprometen a brindar a sus clientes, así como las comisiones que piden a cambio. En dependencia de la accesibilidad y competencia de los mismos, puedes elegir el más apropiado para ti.
¿Cuál es el broker correcto?
Un buen broker te ofrece un asesoramiento personalizado en la medida que el mercado esté abierto. De esta forma te ofrece una amplia variedad de opciones de inversión.
Elige uno de reputación reconocida. Debe darte la posibilidad de gestionar tu cartera de inversión con toda la comodidad posible. De igual forma te da tarifas competitivas.
Realiza un análisis del mercado
Como ves, debes quitarte el mito de que para comenzar en este mundo debes ser un experto en el tema. Aunque es claro que no puedes estar impulsado por una corazonada ya que te llevaría a perder dinero.
Un consejo muy importante es el de aprender a analizar el mercado. Haz una investigación de los principales conceptos sobre cómo funciona el mercado financiero. Una vía fácil puede ser entrar a la bolsa de valores de tu país y ver la información que ahí te brinda.
Si estás comenzando es mejor que elijas una inversión a largo o mediano plazo. Esto te permite hacer estudios más profundos acerca de los movimientos que hace la empresa con la que deseas comprar las acciones. El asesoramiento puede ser clave y, por consiguiente, el corredor que elegiste.
Es importante que tus inversiones sean en empresas donde se vea bien clara la estabilidad y rentabilidad. Garantizando esto tus riesgos serán disminuidos. Además, tu estudio debe contener un aspecto a valorar el grado en el que la empresa paga a los inversionistas y si ha sido responsable en dicho punto.
Diversifica tus inversiones
Ya una vez que hayas empezado en este mundo, es importante que sigas tu aumento de conocimiento y de experiencias al respecto. La diversificación de las acciones es algo que aprenderás es vital para generar más ganancias.
Seleccionar empresas rentables en diferentes sectores de producción pudiera ser la solución. También puedes invertir en otras bolsas de valores en el extranjero que te den mayores oportunidades. Además, puede que sean hasta más rentables.
Esto también depende del broker que escojas, ahí puedes invertir en bolsas fuera de tu país, que sean las mejores y así ampliar tu margen de rentabilidad.
Saber cuándo comprar y cuándo vender
La diferencia entre ganar o perder dinero en este mundo puede estar dada por la determinación del momento ideal para comprar o vender una acción. Aquí es donde puedes ver la importancia del análisis de la empresa y la determinación del punto en el que se encuentran tus acciones.
Por ejemplo, si la empresa tiene un buen momento y existe mucha oferta, el precio de las acciones bajará y tendrás más oportunidades de tener rentabilidad en el momento en el que los precios de las acciones suban y se acerquen a los valores reales de las mismas.
Los brokers tienen un gran peso en la determinación del momento más favorable para comprar o vender, aunque la decisión final es tuya como inversionista.
Vigila tus acciones
No es menos cierto que los corredores son los encargados de administrar las inversiones de sus clientes. Pero estar al tanto de la evolución de estas es responsabilidad de los accionistas.
El mercado de valores no se detiene ni un segundo y siempre está en constante cambio. Tampoco te estoy queriendo decir que debas estar todo el día frente a tu ordenador, pero sí que realices una revisión periódica a la evolución de tus inversiones, para poder tomar decisiones necesarias a tiempo.