Procrastinar: qué es y cómo evitarlo desde hoy

Puede parecernos una situación familiar, el postergar tareas importantes y dar prioridad a aquellas que en realidad son menos cruciales o productivas. Aunque esto suene normal, para quienes lo hacen, es un problema más común de lo que creemos. Sin embargo, es crucial abordarlo para mejorar el rendimiento ¿Quieres saber como se llama? Estamos hablando de procrastinar, eso que nos deja inmóvil por cierto tiempo.

Tabla de contenidos

Específicamente, de ahí radica la importancia de aplicar diversas estrategias efectivas con el objetivo principal de dejar de procrastinar y así aumentar la productividad. En primer lugar, es esencial comprender que hay razones lógicas detrás de esta tendencia, siendo la falta de motivación la más destacada. Por ende, todo lo que emprendemos y todo lo que hacemos debería surgir de una verdadera pasión, eliminando así el temor al fracaso.

¿Qué es la procrastinación?

El significado de procrastinación se refiere a la incapacidad de realizar tareas importantes y, en consecuencia, ser una persona menos productiva. Normalmente, esta incapacidad se debe a un atasco u obstáculo mental, que trae diferentes consecuencias negativas.

Qué es la procrastinación

Asimismo, esto puede terminar en un habito si las personas no buscan por si sola la forma de controlarse. Finalmente, trae consecuencias especificas negativas en la falta de productividad, que más adelante empeorara considerablemente.

¿Por qué procrastinamos?

¡Por supuesto! Todo esto tiene una explicación lógica: son los atascos mentales que coloca nuestra mente, principalmente el miedo al fracaso. De igual forma, muchos seres humanos no tienen la motivación suficiente (algo o alguien) que los haga cumplir sus metas. También pueden estar siendo afectados por la rutina, lo cual les afecta mucho emocionalmente al realizar una tarea específica, ya que no tienen la suficiente energía, motivación o impulso, y tampoco tienen una recompensa que consideren satisfactoria.

Presión o la falta de organización

Otra de las causas, que también se considera importante, se trata de la presión o la falta de organización. Muchas veces, cuando se tiene una tarea con mucha urgencia, nos bloqueamos en su totalidad. Sin darnos cuenta, aplazamos nuestras prioridades hasta que somos capaces de obligarnos a tomar riendas en el asunto.

Sin duda, la organización para no procrastinar es importante. Saber cuánto tiempo llevará cada una de nuestras tareas, en qué momento del día tendremos la mayor motivación para realizarla y cómo puede encajar cada tarea como una pieza de rompecabezas, puede hacernos mucho más productivos, logrando así que nada influya en la creación de un hábito de procrastinar.

Procrastinar: un hábito común que afecta la productividad personal

Existen varios factores que influyen en este tema, siendo la falta de organización uno de los más relevantes. A menudo, nos enfrentamos a problemas inesperados que nos toman desprevenidos, pero saber organizarse puede ser clave para no dejarnos afectar y ser personas más productivas.

Además, es crucial establecer metas claras y realistas, evitando la tentación de querer abordar demasiadas actividades en poco tiempo. Esto nos permite mantener una visión clara y, al evitar resultados decepcionantes, nos resultará más fácil tomar medidas la próxima vez.

Como expertos, recomendamos la creación de un plan detallado que facilite la acción en lo que debemos hacer. Atender cada asunto, por pequeño o grande que sea, debe realizarse con acciones concretas, divididas en pequeñas tareas que nos ayuden a cumplir plazos de tiempo realistas y no retrasar nuestras actividades.

Consejos prácticos para evitar el procrastinar en el trabajo diario

Todo esto debe ir acompañado de otro consejo valioso: la importancia de eliminar las distracciones. Son pequeñas cosas y minutos que, sumados, hacen que perdamos el tiempo, a menudo sin darnos cuenta.

Eliminar las interrupciones

Entre estas distracciones que debemos eliminar encontramos el hábito de mirar el teléfono y responder mensajes cuando estamos realizando nuestras actividades, así como evitar perder tiempo en redes sociales y reducir al mínimo las interrupciones mientras trabajamos.

Procrastinación en el trabajo remoto

Para aquellos que trabajan desde casa, es especialmente importante tener un espacio privado y establecer tiempos estimados de trabajo, de al menos 2 horas, con pausas activas cada media hora. Implementar un trabajo en una oficina o lugar donde no se tengan problemas de interrupción por consecuencia aumentara la productividad, al igual que la concentración.

Procrastinación en el trabajo remoto

De esta forma se logra abordar principalmente nuestras responsabilidades. Logrando una optimización de tiempo y energías, convirtiéndonos en personas que lleven un enfoque consciente e implementen la disciplina. Lo que, en un futuro, nos llevara a ser felices por haber cumplido nuestros objetivos.

Gestión del tiempo – Una herramienta clave contra el procrastinar

Cuando buscamos el significado principal de procrastinación nos topamos con el significado natural de su nombre, que proviene del latín procrastināre, que significa dejar para mañana lo que puedes hacer hoy. Esto sucede por un estímulo mental voluntario. Un dato interesante es que esto también deriva de la palabra en griego antiguo akrasia, que, aunque sabemos que está mal, decidimos hacer.

Este hábito empieza a manifestarse en la vida rutinaria tomando diferentes formas. Normalmente, este hábito comienza perdiendo el tiempo sin sentido en las redes sociales, hasta llegar a la pérdida de tiempo tan elevada, dejando de hacer actividades prioritarias e importantes. La procrastinación no permite que seamos seres productivos y que alcancemos nuestras metas. Es la causa prioritaria por la cual el ser humano no evoluciona.

Consejos para dejar de procrastinar ¿En cuanto tiempo se logra?

Puede sonar muy cliché decir que lo importante es darse cuenta de que tenemos un problema y atenderlo. Pero, realmente, es así cuando hablamos de procrastinación. No necesitamos horas de terapia para darnos cuenta de que estamos cometiendo un error y que simplemente necesitamos resolverlo.

Al identificarlo, también debemos saber cuáles son los patrones mentales que ocurren al momento de la procrastinación. De esta forma, debemos buscar la respuesta dentro de nosotros y hacernos preguntas para ayudar a entender, la principal razón por la cual procrastinas. Al entender de raíz nuestro problema podemos empezar a buscar estrategias, que nos ayuden a identificarlo y también evitarlo. Por lo tanto, lo haremos de la siguiente forma:

Establece metas claras y realistas

En caso de que tengamos un grupo de tareas u objetivos por hacer, debemos fijarnos pequeñas metas y organizarlo de manera que nos alcance el tiempo para terminarlas antes de llegar a la fecha límite.

Organiza tu tiempo.

Aplicar la estrategia anterior es importante, y para ello, podemos utilizar distintas herramientas. Si nos encanta la tecnología, podemos usar aplicaciones o agendas en el teléfono que nos ayuden a gestionar cada tarea en bloques. Es necesario que se señale el tiempo específico que llevará cada una y de esta manera realizarlas en ese tiempo.

Alejemos todo lo que nos distraiga.

Eliminar las distracciones es un paso muy importante, clave y fundamental. Debemos dejar de lado contestar el teléfono, atender asuntos de la casa o familia, o realizar cualquier otra tarea paralela. Solo debemos concentrarnos en lo que estamos haciendo para terminar rápido y hacerlo de la manera correcta.

Técnicas de gestión del tiempo para combatir el procrastinar

Uno de los mayores recursos que nos ha ofrecido la historia es el método de gestión del tiempo que se desarrolló en 1980; este mismo fue responsabilidad de Francesco Cirillo, quien encontró la forma de gestionar el tiempo dividiéndolo en intervalos pequeños pero enfocados.

Técnicas de gestión del tiempo para combatir el procrastinar

Es decir, llevado a su máxima concentración, pero entre ellos hacer pausas activas. ¿Quieres conocer esta técnica para combatir la procrastinación? Los pasos para aplicarla son los siguientes:

Es necesario que elijas una tarea específica que quieras realizar en este momento. Tendrás que configurar un temporizador por lo menos de 25 minutos. Debes concentrarte para terminar esta tarea en el tiempo especificado en el temporizador. No debes tener ninguna interrupción en el momento en que empieces a ejecutar la tarea.

  • Después de que se cumplan los 25 minutos, debes hacer una pausa corta de 5 minutos. Da una vuelta, párate de la silla en caso de que estés sentado, toma agua o estírate. Repite este procedimiento hasta una ronda de cuatro veces, lo que te dará aproximadamente de 15 a 30 minutos para tomar un breve receso.

Esta técnica de Pomodoro garantiza que, al dividir el trabajo en intervalos cortos, pero bien enfocados, no solo mejorarán la productividad haciéndote capaz de completar más tareas, sino que también lograrás tener una mayor concentración y enfoque en lo que decidas hacer.

Está comprobado que esto ayuda a tener un respiro mental y evita la fatiga cada vez que realizamos una tarea. Aunque esta técnica también puede adaptarse a distintas situaciones o intervalos de tiempos que sean necesarios.

Compartir las metas para buscar apoyo y no procrastinar

Muchas veces nos volvemos personas muy reservadas y no compartimos nuestras metas por miedo al fracaso. Sin embargo, hacerlo puede ayudarnos mucho, ya que la persona con la que compartamos, bien sea un familiar o un amigo, puede apoyarnos o motivarnos para que logremos conseguir esas metas.

Celebrar los logros para evitar el procrastinar

Emocionarse por los pequeños logros o celebrar las pequeñas metas u objetivos alcanzados ayudará a mantenernos siempre motivados. De esta forma, reforzamos nuestra seguridad en las metas y nos ayuda a cumplir nuestros próximos propósitos de una manera más fácil, logrando hacer mucho más productivo el proceso y que no nos cueste tanto. Es como reforzar el compromiso de nosotros para nosotros en las metas que tenemos.

Celebrar los logros para evitar el procrastinar

Sin embargo, estas técnicas no van a funcionar de la noche a la mañana, ya que es un proceso interno y mental en el cual se debe trabajar y no siempre será fácil. La clave para lograrlo es no dejar de intentarlo y, aunque fallemos, volver a intentarlo. Es completamente normal si existe algún tipo de retroceso después de haber tenido un avance. Sin embargo, todo está en tener perseverancia y usar las estrategias adecuadas, que hemos mencionado anteriormente.

Importancia de dejar de procrastinar y ser más productivo.

Son grandes los cambios cuando entendemos que este hábito es dañino para nosotros y afecta nuestra productividad al 100%. Es la principal razón por la cual nos sentimos desanimados cuando no cumplimos nuestras metas.

Por esa razón, siempre se debe tratar de dejar el procrastinar a un lado y dejar de posponer las tareas importantes, y mucho menos dejarlas para última hora. Incluso más allá de todo lo que genera en nuestro cuerpo, como el estrés mental, también tiene consecuencias en nuestro trabajo, como entregar un trabajo de baja calidad.

Muchas personas creen que el procrastinar se trata de tener flojera. Sin embargo, no se trata de dejar de hacer actividades o de no hacer nada; es algo más profundo, como no organizar tu tiempo de forma productiva.

Es importante ordenar las tareas en orden de prioridades; una simple mala gestión del tiempo puede dañar tu semana, un mes e incluso un año. En un tiempo prolongado, te darás cuenta de que no has cumplido los objetivos que seguramente te has propuesto.

Libros de procrastinar

Existen información bibliográfica de expertos en libros que se han interesado sobre este trastorno emocional, pero que ayudan a las personas a tener una guía. El mas famoso de ellos se trata de: “The Procrastination Equation: How to Stop Putting Things Off and Start Getting Stuff Done”.

El autor del mismo es un profesor de psicología motivacional de la Universidad de Calgary, un profesional bastante preparado, que se encargó de definir más allá de lo psicológico y lo clínico. En busca del poder entender el comportamiento del ser humano y  el daño que suele hacernos la mente a nosotros mismos.

Detalla la importancia que tiene para estas personas darse cuenta de que lo hacen, porque a partir de allí empieza a mejorar su vida si así lo quieren. Pasamos mucho tiempo sintiéndonos mal por lo poco que hemos logrado y como siempre estamos abarrotados de cosas que hacer y de trabajo; sin embargo, no gestionamos correctamente el tiempo. A pesar de que dentro de nosotros sabemos que debemos hacer una tarea y simplemente decidimos no hacerla, ¿cómo le llamamos a esto? La difícil procrastinación.

Finalmente, y sin duda, termina siendo un círculo irracional, ya que quedamos incapacitados para tomar decisiones y, por supuesto, también entendemos que esto producirá cambios de ánimo negativos que tampoco podremos manejar.

Explicación psicológica de la procrastinación

No obstante, tenemos conocimiento de que la procrastinación no sucede simplemente porque sea un problema mental, ni sucede por magia. Sino que a lo largo de la vida nos enfrentamos a una serie de obstáculos desafiantes, empezamos a presentar estados de ánimo negativos que conllevan alguna tarea y, por consecuencia, nos hacen sentir ansiedad, frustración, inseguridad, resentimientos, entre otros.

De esta forma, nuestra mente se incapacita para realizar esta tarea de forma voluntaria. Entonces, psicológicamente, podríamos decir que el procrastinar viene de un problema psicológico y emocional, ya que no sabemos regular las emociones y tampoco gestionar u organizar el tiempo como es debido.  Otro profesor de psicología conocido en todo el mundo, de Ottawa, Canadá, como lo es Tim Pychyl, es quien ha sacado estas conclusiones acertadas.

Para ello, participó en el descubrimiento de cómo la mente o el ser humano podría trabajar mejorando su estado de ánimo a corto plazo, más que tratar de hacerlo a largo plazo. Ya que a corto plazo es posible manejar los estados de ánimo negativos y enfrentarlos. Esto te hace sentir más seguro y mejor como persona para evitar la procrastinación.

Procrastinación y la naturaleza del ser humano

La psicología también habla de la naturaleza del ser humano y de cómo actúa ante una tarea que tiene que hacer. Normalmente, esto sucede antes de tareas que no son placenteras o que tienen que ver con la organización o el trabajo.

Procrastinación y la naturaleza del ser humano

No obstante, algunos de estos sentimientos negativos que nos generan incomodidad están muy dentro de nosotros, sin que nos demos cuenta en primer plano de que los tenemos. Algunos de estos sentimientos pueden ser principalmente la ansiedad y la inseguridad, y luego tenemos la baja autoestima y el dudar de uno mismo.

De esta forma, nuestros pensamientos nos inmovilizan para realizar alguna tarea determinada. Sin embargo, decidimos hacer cualquier otra tarea que también consideremos importante, pero que no era de forma prioritaria.

Problemas de los pensamientos de procrastinar

Aunque creamos que son pensamientos sin importancia, hasta la comunidad de investigación ha encontrado una respuesta ante estos pensamientos, que no son para nada buenos. Aún peor resultan ser los pensamientos que vienen luego en consecuencia de la procrastinación, al sentirnos incapaces de hacer alguna tarea; a esto le llamamos Cogniciones Procrastinatorias. Básicamente, dependen de emociones como angustias y estrés, lo que genera un peor panorama para las personas que sufren de procrastinar.

Sin embargo, lo que hace de esto un círculo vicioso es el alivio temporal que produce después de que sucede una procrastinación. Ya que cuando nosotros nos inhabilitamos para cumplir una tarea, nos damos la propia orden de ser libres y hacer lo que queramos.

Es como si fuéramos recompensados por algo que no hicimos. Por eso, la procrastinación resulta ser un comportamiento repetitivo, porque busca el alivio de sentirse bien, pero realmente, a largo plazo, eso traerá consecuencias negativas y se convertirá en un hábito crónico.

La procrastinación crónica ¿De que se trata?

Las consecuencias a largo plazo y el pasar el tiempo van comprometiendo tanto nuestra salud mental como física. Las repercusiones de las cosas que no estamos haciendo se reflejarán rápidamente en cualquier área de nuestra vida. De igual forma, nos sentiremos inconformes con nosotros mismos, ya que seremos incapaces de cumplir metas y luchar por lo que queremos.

Depresión y ansiedad

Esto luego provoca la temida depresión y ansiedad, que requieren tratamiento médico para poder superar. Incluso las personas que han sufrido por un largo tiempo la procrastinación, volviéndose crónica, comienzan a presentar enfermedades como hipertensión y enfermedades cardiovasculares que suelen ser tan peligrosas.

Muchas veces caemos en la falsa creencia de que realizar una procrastinación es mejor para la salud y para evitar sentimientos como el estrés. Por eso nos damos el derecho de ser libres y dejar de hacer tareas importantes, pero realmente nos estamos haciendo daño a nosotros mismos.

¿Cómo vencer efectivamente el estrés?

Primero que nada, debemos pensar que la situación de estrés no ayuda en nada a que podamos ser más productivos, y ya sabemos que el estrés es la consecuencia más directa de realizar la procrastinación. Después de no hacer nada, una parte de nuestro cerebro detectará amenazas ante alguna tarea que debemos hacer pero que no realizamos.

Suspende la orden al cerebro

Puesto que está codificado por nosotros mismos con la orden de que no ejecutaremos esa tarea en un tiempo inmediato. Nuestro cerebro estará conectado hasta que nosotros suspendamos la orden y eliminemos esa amenaza que él considera siempre presente. Para ello, nos tenemos que obligar y sentarnos a realizar la tarea que tanto hemos estado evitando.

Codificar nuestro cerebro

Existe una solución bastante efectiva después de certificar que hacemos la procrastinación en nuestras vidas recurrentemente. Esta consiste en empezar a codificar nuestro cerebro para abordar tareas que decidimos hacer.

Para ello, debemos hacer la tarea una por una, configurar nuestra mente para que sean hábitos y responda cuando nosotros mismos no queramos llevarnos a hacer una tarea. La mente debe responder obligándonos a realizarla, evitando cualquier pensamiento negativo que impida hacerlo, aunque muchas veces creamos que lo estamos haciendo de forma positiva para ayudarnos a nosotros mismos. Esa es una de las principales excusas que nuestra propia mente se pone para creer en la procrastinación.

Estrés y procrastinación: ¿Cómo superarlos?

Ahora que ya conocemos todo sobre la procrastinación y los daños que traerá a nuestra vida si la aplicamos recurrentemente o no la controlamos, tenemos claro que el estrés y la procrastinación están involucrados directamente. Pero si eliminamos el problema, también eliminamos la consecuencia que es el estrés.

Evita la presión

Muchas veces sabemos que existen ciertas actividades o compromisos que nos generan presión y ansiedad. De esta forma, surge el nacimiento de la procrastinación. Si logramos detectar cuáles son este tipo de actividades y logramos no hacerlas o comprometernos desde el principio, no estaremos obligados a estar bajo presión. Muchas veces solo hace falta no hacerlas de manera tan seguida. De esta forma, reduciremos la presión y el estrés, y la procrastinación no aparecerá en ningún aspecto de nuestras vidas.

Ciertamente, muchas veces nosotros mismos solemos abrumarnos con nuestros planes y proyectos. Sin embargo, aunque seamos muy soñadores, debemos tener los pies sobre la tierra. Entender que estos planes, que son exigentes para nosotros mismos, finalmente nos generará estrés. Muchas veces también se trata de lo que genera el miedo al fracaso, que nos afecta tanto que nos deja inmóviles generalmente.

Romper el circulo vicioso

Ya entendimos por qué la procrastinación resulta ser un círculo vicioso que trae tres y alivio a nuestras vidas, que finalmente termina siendo un falso alivio. Evita las tareas en plazo cercano hasta que sepas identificar las situaciones y saber cuál de ellas puede darte más presión y estrés adicional que termina siendo procrastinación.

Se puede leer muy fácil, pero sabemos que es difícil encontrar el equilibrio perfecto para romper el ciclo de la procrastinación y encontrar el equilibrio perfecto ante la procrastinación.

Sin embargo, todos los profesionales, tanto del área de psicología como de ciencia e investigación, señalan que al detectar el problema y lo que lo causa podemos evaluar la implementación de hábitos positivos en la vida. Esto puede marcar el fin a un ciclo de procrastinación y siempre mantenerlo controlado.

Técnicas de gestión de tiempo para no procrastinar

También es necesario que planifiquemos nuestra vida de forma tal que podamos ser personas organizadas respecto a la gestión de tiempo; es una forma muy efectiva que funciona para dejar atrás la procrastinación. De esta manera, te explicaremos algunos tips, parecidos a los de la técnica pomodoro explicada anteriormente, para dejar de procrastinar.

La matriz de Eisenhower

Una de las técnicas efectivas de gestión de tiempo es la matriz de Eisenhower. Buscar la organización en las diferentes tareas que se tienen, clasificándolas con dos características precisas como lo son la importancia y la urgencia. Específicamente, debemos tener las siguientes categorías: importantes, pero no urgentes, urgentes, pero no importantes, importantes y urgentes, no importantes ni urgentes.

Imagina que cada una está en una especie de cesta, que está puesta en una fila, por lo cual vas a elegir las que son urgentes e importantes y así seguir con la fila es esta que tienes por hacer seguidas a las demás. De esta manera, vas a saber cómo empezar a abordar las tareas.

La regla del 80/20

Otro método que puede ser de gran ayuda se trata de conocer que solo se necesita el 20% de esfuerzos para tener el 80% de tus resultados. Por lo tanto, debes hacer primero las tareas que logren mayores resultados o sean más grandes, para enfocar tu mayor tiempo y energía en ellas. Finalmente, cuando salgas de ellas solo quedarán tareas pequeñas que podrás hacer en un periodo corto de tiempo y que no necesitan tanta concentración y enfoque de tu parte.

Síntomas de procrastinar

Debemos mantener siempre presente que no se trata de un trastorno específico, el cual podemos definir síntomas clínicos. Sin embargo, este mismo lo podemos conseguir en nuestros comportamientos y los diferentes patrones, que permiten identificar si una persona lo padece o no. Por ejemplo, si la persona normalmente posterga lo que tiene que hacer una y otra vez puede ser un síntoma común de procrastinar.

Síntomas de procrastinar

Así como también tenemos la posibilidad de que la persona tenga en cuenta excusas frecuentes que pueden evitar que se ha cumplido responsable con las tareas que debe hacer. Referente a esta última busca la mayor cantidad excusa que existe para no comenzar a hacer las tareas. Muchas hasta pueden tener un momento perfecto para hacer lo que tienen que hacer.

Sentimientos de culpa o arrepentimiento

Es posible que las personas se cohíban de hacer las tareas. Porque después pueden presentar sentimientos de culpa o arrepentimiento. Es completamente normal que cuando no cumplimos o logramos un objetivo, nos sentamos de esta forma y es probable que en las personas lo tomé como un ciclo repetitivo de procrastinación. Sobre todo, porque después viene un sentimiento de alivio, cuando hacemos las tareas atrasadas.

Estrés y ansiedad

Uno de los síntomas que es más alarmante, pero también más común, se trata de que la persona tiene demasiado estrés y ansiedad. Es por eso que evita realizar la tarea que le generen presión. De esta forma puede justificarse el mismo que tiene emociones negativas.

Baja autoestima

Aunque la baja autoestima y la incapacidad para hacer cosas pueden generalizar todos estos síntomas tenemos en cuenta que la procrastinación es un comportamiento que es bastante complejo. Esta puede incluir muchos factores o elementos necesarios para armar un rompecabezas que explique por qué la persona está presentando estos síntomas.

Datos importantes para luchar contra el procrastinar

Aunque muchos dirán que esto es un proceso fácil, puedo garantizarte que no lo es. Así que si estás luchando contra dejar de procrastinar déjame decirte que no estás solo ¡Porque estamos aquí para resolverlo!

Son muchas personas que pueden presentarla, debido a estrés o alta presión laboral la procrastinación. Por eso, como expertos, te daremos los mejores consejos, pero también te ayudaremos a que te puedas adaptar a cada uno de ellos. Sin embargo, si te parece un proceso demasiado difícil, lo más aconsejable es que consultas un especialista.

Descomponer tareas

En principio, te ayudaré a entender la importancia de descomponer tareas. Existen muchas tareas que son en gran volumen, aunque las mismas pueden ser fácil. Entendiendo esto, sabemos que, al tenerlas acumuladas, puede ocasionar una observación en nuestra mente que nos impide tomar acción.

En esta clase de situación te recomendaremos que “solo escojas una sola tarea para resolverla” Debes dar ese paso principal de hacer la primera. Luego a partir de allí no vas a contar. Cuántas tareas iguales o similares te hacen falta, si no las que ya llevas. De esta forma, al ver la cantidad que ha resuelto se van haciendo menos y menos porque estás enfocado en todo lo que has logrado rendir.

Si una tarea es demasiado grande, nunca intentes hacerla o resolverla el mismo día porque por cuestión de tiempo no lo lograremos. Es a los que nos lleva al punto número dos que te explicaré a continuación.

Establecer metas claras

Se trata de establecer metas claras, es decir, debes conocer muy bien cuánto tiempo te va a tomar cada tarea. En caso de que no tengas un tiempo estimado, puedes colocarle uno muy por arriba de lo que vas a durar.

También puedes hacer la prueba de hacer una tarea como está y medir el tiempo, no la hagas de manera rápida sino más bien lenta para que siempre tengas por encima un tiempo estimado. Esto evitará a presionarte, pero también te llevará a organizar el tiempo prudentemente.

En caso de que existan tareas prioritarias, siempre debes colocarlas de primero. De tal forma que, si tienes la posibilidad de hacer las tareas más complicadas antes que las otras, el tiempo siempre te va a rendir al doble.

Recuerda que eres un ser humano como cualquier otro y no tienes superpoderes y no puedes hacer todo mismo día. Al entender esto te presionarás menos y entenderás que existe tiempo para todo.

Evita la acumulación de trabajo y de tareas

De esto va a depender mucho el ser organizado y de siempre tener un plan. Pero una vez lo implementes, las próximas veces serán más fáciles, porque sabes qué tipo de tarea puedes hacer en cada espacio vacío que tienes.

Organizar el tiempo no se hace por arte de magia y algunas veces nos podemos equivocar en tomar decisiones, porque no somos adivinos ni magos. Pero, al tomar en cuenta estos consejos e informarnos sobre las cosas que no sabemos manejar, podemos lograr tener un plan y una guía clara de cómo vamos a hacer para poder hacer todas nuestras actividades.

Crear un plan para evitar la procrastinación

A este punto te darás cuenta de que ya ni siquiera puedes pensar en procrastinar. porque estás empezando a crear un plan. En el cual además te motivará porque podrás empezar a observar cómo hasta tiempo libre terminarás teniendo.

Entender que la procrastinación, más que un problema es el hecho de quedarnos inmóvil ante un montón de tareas acumuladas, nos hace realmente inútil. Condición que luego más adelante nos traerá consecuencias por no cumplir nuestras metas y hasta problemas en lo personal y en lo laboral.

Si además de todos estos consejos quieres uno realmente útil, se trata de la eliminación completa de distracciones. Las distracciones no quieren decir solamente ver videos o chatear por teléfono, sino que también te puedes entretener con cualquier cosa, incluso con el mismo trabajo que estás haciendo perdiendo la concentración. Mantente siempre enfocado en los que estás haciendo y evita ser multitareas.

Evitar las multitareas

Ahora que mencionamos las multitareas, esta también suele ser parte de las distracciones. Una buena agenda organizada quiere decir que primero termines una actividad por completo y comiences otra. Porque si no más adelante a corto o mediano plazo, tendrás todo hecho un desastre y no habrás hecho ninguna de las tareas.

Regalarte tiempo de descanso

La recompensa siempre es la mejor parte de las soluciones, entender que si estamos bien todo fluirá, merecemos regalarnos algo nosotros mismos por el esfuerzo hecho previamente, cuando no pronosticamos. Sobre todo, cuando estamos aplicando estas técnicas, para mejorar y ser productivo cada día. Esto puede incluir al terminar del día con ir por tu comida favorita en un restaurante o regalarte dos horas de descanso para hacer lo que más te gusta.

Establecer rutinas y mantenerte saciado evita la procrastinación

Existen pequeños detalles que son importantes para evitar la procrastinación, como las rutinas que te ayudan a mantener el orden en general en tu vida. Existe tiempo para cada cosa, pero debes siempre mantener especificado qué parte del día, es para cada una de las funciones que debes ejercer. Allí entra la parte importante de mantenerte saciado, como seres humanos necesitamos un tiempo de descanso, ocio y también para nuestras necesidades.

Establecer rutinas y mantenerte saciado evita la procrastinación

Por eso, para evitar procrastinar debemos mantener el cuerpo humano con todas las condiciones que necesita para mantenerse saludable y óptimo funcionamiento. Una persona que se sienta bien porque comió, se hidrató y descansó lo suficiente podrá ser más óptima y productiva que una que no lo hizo correctamente. N

o te obligues a cumplir funciones que realmente no puedes hacer porque muchas veces, aunque el cuerpo esté descansado, la mente no tiene el suficiente descanso.

Influencia de lo emocional sobre procrastinar

Esto también podría influir en lo emocional, por eso se recomienda tener amigo, familiares o una persona especial que pueda motivarte en tus planes o proyectos. Alguien que además puedas contar todos los días para hacer diferente cada uno de ellos, aunque tengas que cumplir funciones aburridas o que realmente no te llame la atención. El Buscar apoyo y sentirse saciado emocionalmente feliz, puede ayudarte a ser una persona mucho más productiva que una simple persona normal.

El bienestar y la salud de cada persona es importante, así que podemos concluir que el habito de procrastinar es bastante importante y se debe tener en cuenta los consejos anteriores para no caer en ella.

En caso de que no podamos manejar la situación de por nosotros mismos y encontrar soluciones, lo más importante es que acudamos a tiempo a un especialista. Ya que los efectos negativos a largo plazo, pueden ser bastante importantes: Como lo son deteriorar tanto tu vida personal, laboral e incluso afectar a tu salud física y mental de una manera profunda.

Tomar decisiones de forma inmediata

Para evitar el procrastinar quiero explicarte un detalle bastante relevante sobre la procrastinación, y este se trata de evitar dejar las tareas para última hora. Esto requiere un poco de disciplina y perseverancia de nuestra parte, ya que debemos implementar en nuestro cerebro la orden en que mientras más rápido lo hagamos, más rápido saldremos de ello.

Por supuesto que cuando lo digas la primera vez el cerebro, siempre va a decir: que le falta tantos días para terminar la tarea, que todavía hay tiempo y miles de excusas para no actuar de forma inmediata. Simplemente, debemos omitir esos pensamientos y hacerlo porque sí, sin ni siquiera pensar en una razón. De tal forma decirnos a nosotros mismos (obligarnos) de se tiene que hacer ahora mismo y punto.

Los seres humanos han sido muy inteligentes y desarrollados para aprender a lo largo del tiempo, que, aunque pensemos demasiado una decisión, finalmente esto no nos garantiza que será la mejor. Mientras más pensamos una decisión, solo lo que hacemos es retardarnos en actuar. Las decisiones que tomemos, no deben ser perfectas, pero sí tienen que ser claras. Además de hacerlo porque así nuestro instinto e inteligencia emocional, no los indica.

Publicaciones Similares