IRPF

IRPF: Todo lo que necesitas saber

El IRPF es sin duda una de las piezas básicas que constituye el sistema tributario en España. Por lo que entender más a fondo como funciona es una obligación cívica que todos deberíamos conocer.

Y es una razón más que suficiente para que respondamos todas y cada una de las preguntas que giran en torno al concepto de IRPF.

¿Qué es exactamente? ¿Cómo se calcula? ¿De qué depende? ¿Existen diferentes tipos? Y todo lo que necesitas saber a continuación ¡Empecemos!

¿Qué es el IRPF?

Primeramente debes saber que el IRPF es un impuesto. O lo que es lo mismo, es una prestación económica que el estado exige, sin ofrecerte ningún tipo de contraprestación a cambio.

¿Estoy obligado(a) a pagarlo? La respuesta es sí, ya que como ciudadanos se debe pagar este impuesto conforme a lo establecido en la ley. Y como mencionamos anteriormente, no tendrás ningún derecho a percibir nada de vuelta por cancelar la deuda.

En resumen, estamos ante un tributo directo y personal que es gravado con bases en la igualdad, la progresividad y la generalidad. Y dicha renta va a depender de la naturaleza de los ingresos y de las circunstancias personales de cada individuo.

Nota: Conocer tus obligaciones fiscales y planificar el tiempo para cumplirlas es necesario para manejar unas finanzas saludables. (Esto no solo aplica a personas o familias, sino también a empresas).

¿Qué es el IRPF en Nomina?

Cuando hablamos de nóminas; el IRPF (Impuesto sobre la renta de las personas físicas) es sin ninguna duda el tributo protagónico. Y esto no solo preocupa  los empleados de una empresa, sino también a los empleadores, y más cuando la nómina debe calcularse.

Es así como como la retención del IRPF dentro de las nóminas debe ser adelantado a las agencias tributarias todos los meses. O en otras palabras, funciona como un “anticipo”que se muestra en forma de retención.

Por ello, el IRPF nomina es pagado por la empresa directamente a la Agencia Tributaria; mediante algunos modelos como el conocido “Modelo 111”. Que es presentado cada mes o cada trimestre.

A esto se suma, que las empresas deben presentar también un modelo anual informativo que se conoce como Modelo 190 que sirve para declarar las retenciones, bases y datos de los empleados y profesionales dentro de la empresa.

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Modelo 190 ¿Cómo funciona?

Una vez la empresa presenta el  Modelo 190 en el mes de Enero, va a recibir un certificado de retenciones que debe enviar a todos y cada uno de los empleados dentro de su nómina. Ya que es el método para que estos hagan sus declaraciones de renta ante hacienda.

Y es en este punto donde entra en el juego otro modelo importante del IRPF en empresas que es el “Modelo 145”.

Modelo 145 ¿Para qué sirve?

Cuando se busca una declaración completa y sobretodo precisa, cada empleado va a necesitar la ayuda del Modelo 145.

Ya que este es detalla cualquier circunstancia personal o familiar que tenga relevancia o que afecte directamente a la retención del IRPF.

Por ello, es tarea de las empresas asegurarse enviar este modelo más los certificados de retenciones a cada empleado obligatoriamente. Ya que esto va a facilitar considerablemente la declaración de la renta a cada uno de los trabajadores involucrados.

Impuesto sobre la renta personas físicas: Datos extras

Primeramente y como ya hemos indicado; las siglas IRPF significan Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. Y es el impuesto con mayor relevancia del sistema tributario.

Por ello, te invitamos a conocer algunos datos extra que van a ayudarte a entenderlo mejor:

  • Es importante que sepas que: Mientras mayor sean los ingresos percibidos, también será mayor el impuesto que debe pagarse.
  • Este impuesto aplica en todo el territorio nacional. Aunque cada comunidad autónoma podrá establecer algunas deducciones especificas si lo necesita.
  • Si estás en una nómina el IRPF será aplicado directamente  y de forma anticipada ante la Agencia Tributaria.
  • El IRPF permite la financiación de distintos proyectos de carácter público.
  • Es un método ideal para asegurarse que la ciudadanía está cumpliendo con sus obligaciones.

Nota: Antes de presentar la declaración de renta, es importante que te informes bien, pues podrías generar un resultado a tu favor. Es decir, podrías no deber nada o recuperar alguna parte de los impuestos que ya has cancelado previamente.

¿Por qué se paga el IRPF?

Su finalidad principal se basa en responder a los principios establecidos por la Constitución Española. Ya que dice que cada uno de los ciudadanos o personas físicas  deben contribuir al sostenimiento de los gastos públicos del país.

Además, es un método que busca favorecer a aquellos ciudadanos  con condiciones precarias. Ya que busca contribuir a una economía mucho más eficiente al castigar o promover fiscalmente diferentes actividades.

¿Qué grava exactamente el IRPF?

Simple, los ejercicios en torno a la renta ¿Cuáles son estos ejercicios?

Por un lado tenemos los rendimientos de trabajo que se componen básicamente de los salarios y otras rentas menores como aquellas provenientes de pensiones.

Y por otro lado, tenemos los rendimientos de capital que son todos aquellos ahorros o inmuebles. Aunque también están los rendimientos de actividades económicas, pero de todos estos rendimientos hablaremos más adelante.

El punto es que, las ganancias netas son aquellas que quedaran gravadas dentro del patrimonio personal de cada ciudadano.  Aunque es importante resaltar que siempre existen casos en los que la ley imputa la exigencia de estos impuestos.

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¿Quiénes pagan el IRPF?

Es un impuesto exclusivo para las personas física; que son todas aquellas personas que residen en territorio español.

Ahora bien, no necesariamente debes haber nacido en España, ya que independientemente de tu origen o nacionalidad, si vives en el territorio estarás obligado a pagar el IRPF.

Ahora bien, si tienes nacionalidad española y vives en el extranjero; no tendrás que pagar el impuesto sobre de la renta de personas físicas.

¿Qué se toma en cuenta para el cálculo del IRPF?

Dentro de todas las rentas gravadas, deben incluirse también algunas fuentes que hay que presentar anualmente; estas son:

  • El rendimiento de trabajo y las pensiones (Ya sea por cuenta ajena o por cuenta propia).
  • Todos los rendimientos de capital obtenido, incluso aquellos que se perciben por bienes inmuebles o ahorros.
  • El rendimiento de todas y cada una de las actividades económicas que se llevan a cabo.
  • Cada ganancia o pérdida patrimonial, así como todas las imputaciones de renta.

Es así como al momento de declarar la renta, todas las personas contribuyentes deben incluir todo lo que han percibido.

¿Quiénes son las personas contribuyentes? Lo repetimos, son todas aquellas residenciadas en territorio español o en extranjero con ingresos provenientes de España.

Nota: Si tu anticipo o retenciones totales superan lo que realmente debes pagar. Entonces hacienda va a devolverte el excedente. Mientras que en casos contrarios donde no has pagado la totalidad la deuda correspondiente; esta será reflejada en el resultado final de tu declaración.

¡Muy bien! Ahora que conoces mejor que es el IRPF y la finalidad que tiene. Pasemos a conocer las diferencias más notorias entre este impuesto dentro de una nómina y el que debe aplicarse a los autónomos.

IRPF: Impuesto Progresivo e Impuesto Directo

El principal tributo dentro del sistema fiscal español (IRPF) tiene 2 características importantes de definir. Estas son el impuesto directo y el impuesto progresivo, definámoslas más a fondo:

El impuesto directo

Es el que se aplica directamente a los impuestos generados por los contribuyentes. Además, en este impuesto aparecen algunas figuras importantes como el IVA. (Que es el Impuesto de Valor Añadido) y que es calculado sobre el valor de cualquier mercancía dentro del marco legal.

Los impuestos progresivos

Estos están representados por el porcentaje de pago que aumenta cuanto más se ingresa. Por lo que el IRPF se convertiría en el impuesto progresivo por excelencia dentro del territorio español.

Ahora bien, recordemos que las Comunidades Autónomas poseen una potestad normativa del 50% de este tributo.

Nota: La declaración de la renta debe hacerse entre los meses de abril y junio de cada año, y es indispensable para pagar este tributo.

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¿Cómo se calcula el IRPF?

En términos generales el impuesto sobre la renta se estima con la ayuda directa de documentos como las nóminas o la contabilidad de un negocio en base a lo establecido en la ley.

Así como también en base a la información fiscal remitida por los Bancos en torno a la renta de los productos financieros, por dar un ejemplo.

A pesar de esto, la estimación del IRPF que producen algunos negocios, es realizada basándose en cálculos estimados en función de diferentes características objetivas dentro de cada empresa, negocio o caso particular.

¿Toda la renta queda gravada?

La respuesta es no, ya que solo se grava la renta una vez todos los gatos necesarios han sido deducidos, pues de no ser así, no podría generarse.

Un ejemplo de esto, puede verse en las cotizaciones de la Seguridad Social, ya que son necesarias para calcular u obtener los salarios, por ello no quedan gravadas. Y esto también pasa con algunas comisiones pagadas en base o en relación a los ahorros.

¿Toda la renta gravada se obtiene con dinero?

No necesariamente, ya que pueden obtenerse rentas en especie que también quedaran gravadas. Un ejemplo sencillo puede darse en una empresa donde se paga a los trabajadores con servicios en lugar de dinero, y este tipo de renta también está sujeta al IRPF.

Calculo del IRPF

Al tratarse de impuesto complejo y que guarda muchas excepciones, queremos encargarnos de asesorarte correctamente para que pagues solo lo justo.

Veamos los distintos cálculos posibles:

Calculo en las nóminas:

La agencia Tributaria cada año pone a disposición las Tablas de IRPF en función de las cuales todas las empresas deben retener un porcentaje determinado por cada uno de los empleados dentro de su nómina.

Ahora bien, este cálculo es individual en cada trabajador, ya que no solo es calculado el sueldo o salario bruto, sino también la situación personal  de cada uno de ellos. Por ejemplo: Si existe alguna discapacidad, el número de hijos e incluso la edad del contribuyente.

Dicho esto existen 2 formas en las que se puede llevar a cabo esta retención:

  • Prorrateando entre 12 y 14 pagas al año.
  • A través de porcentaje crecientes y decrecientes a lo largo de 1 año.

Y es que son justamente estas diferencias las que hacen que el importe total pueda o no variar. Además, algunas personas podrían estar excluidas de  este pago o retención ¿Es esto posible?

La repuesta es si, ya que la AT establece una cantidad de los ingresos mínimos que debe percibir cada ciudadano.

Y es aquí donde se pone en relación la situación familiar del individuo y el número de hijos que posee, o tiene bajo su cargo. Por ello, si los ingresos no llegan a cubrir el gasto mensual dentro del hogar, no habrá ninguna obligación de pagar el impuesto.

Nota: Los porcentajes dentro de las tablas del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas pueden variar cada año; ya que todas ellas están sujetas a las modificaciones que puedan realizarse en la ley.

Trabajadores por cuenta ajena

Dentro de todo lo que se percibe como trabajadores por cuenta ajena existen también diferencias en lo que percibimos.

Dicho esto, son devengos:

  • Los sueldos brutos y sus complementos.
  • Todas las horas extraordinarias.
  • Los salarios en especie.
  • Cada una de las gratificaciones.

Ahora bien, no son devengos y no deben tributar:

  • Los suplidos o las indemnizaciones.
  • Cualquier prestación a causa de una incapacidad temporal.
  • Las mejoras voluntarias.
  • El desempleo parcial.

¡Eso sí! Las indemnizaciones como los despidos si son tributadas, solo que la fiscalidad en estos casos es diferente.

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¿Qué pasa cuando tengo 2 empleadores?

En este tipo de casos las retenciones suelen ser menores. Sin embargo, cada empresa ofrece su propio salario y como todas las retenciones pueden prorratearse en porcentajes variables;  es normal que se termine produciendo un desajuste dentro del tributo.

Calculo para personas autónomas

En el caso de los trabajadores autónomos, debes saber que también es su obligación realizar el anticipo del impuesto en base a todos los ingresos percibidos.

Ahora bien, al ser salarios variables cuya procedencia viene de distintos clientes. La Agencia de Tributo creó también tablas para autónomos en función a la actividad en la que se desenvuelvan.  

Sin embargo, esta retención se aplica con un carácter general del 15%, y este porcentaje debe ser incluido en todas y cada una de las facturas generadas.

A lo que podemos sumar el caso de los autónomos profesionales, ya que estos tributan en módulos. Y es que su área laboral generalmente va rodeada de la actividad agrícola, ganadera y las actividades de tipo forestal-

Por último y no menos importante, debemos resaltar que los nuevos trabajadores autónomos disponen de una retención menor en pro de ayudarles con sus nuevas actividades y favorecer aún más a su liquidez.

Sin embargo, para poder disfrutar de estas mencionadas reducciones, deben cumplirse algunos requisitos específicos.

Autónomos sin retención IRPF

Estos están constituidos por empresarios que no son considerados profesionales. Es decir, aquellos cuyas actividades no se encuentran clasificadas en la primera sección del Impuesto de Actividades (IAE). Ya que es justo aquí donde se encuentran detalladas las tarifas correspondientes.

Otros datos valiosos para calcular el IRPF

Empecemos por recordar que la declaración de la renta tiene como objetivo calcular si tienes que pagar o recibir dinero por conceptos referentes al IRPF.

Y esto cobra sentido por diferentes razones, te contamos algunas de las más resaltantes:

  • Todos los contribuyentes mencionados anteriormente; aplican retenciones a cuenta tanto por su trabajo como por cualquiera de sus actividades profesionales.  Ahora bien, estos cálculos deben hacerse con antelación, y en algunos casos, existen cambios que se llevan a cabo con carácter retroactivo.
  • No olvides que el gobierno tiene la voz y potestad final de modificar los baremos del IRPF entre un año y otro. Y esto puede generar en algunos casos que sobre o falte dinero del pago total.
  • Recuerda que este es un tributo progresivo por naturaleza, y hacer algunos ajustes es bastante común.
  • Las pérdidas o ganancias patrimoniales son operaciones no previstas dentro de las retenciones del IRPF. Por lo que el cálculo va a requerir de una serie de comprobaciones que no siempre son sencillas de comprobar.
  • El concepto de residencia fiscal para muchos puede resultar un tanto ambiguo. Y es que a pesar de que la ley indica que para tributar debes tener 183 días viviendo en España, está la excepción de que si trabajas para empresas extranjeras no tendrás que tributar en el territorio nacional. Eso sí, la cifra debe ser inferior a los 60.000 Euros.
  • Toda tipo de donación benéfica estará exenta; sin embargo, dichas donaciones deben estar constatadas en la declaración de la renta.

Como ves el cálculo del IRPF no es tan sencillo, y es una de las operaciones a la que debe enfrentarse la mayoría de los habitantes cada año. Ahora bien, para ayudarte a entender un poco más todo esto, pasemos a explicar los rendimientos que deben incluirse en dicho cálculo.

¿Cuáles son los rendimientos del Impuesto Sobre la Renta de Personas Físicas?

Cuando desea hacer la de declaración de la renta, también deben tenerse en cuenta algunos rendimientos, ya que como mencionamos antes, la cantidad a pagar o a devolver puede variar.

Dicho esto, los rendimientos son los siguientes:

Rendimiento del trabajo

Cuando hablamos de rendimientos de trabajo, nos referimos a todos aquellos que deben ser pagados al llevar a cabo actividades por cuenta ajena. Ahora bien, debemos resaltar que este es uno de los supuestos más habituales, por lo que las empresas suelen retener un porcentaje de los salarios para posteriormente abonarlos a la Agencia de Tributos.

Eso sí, el porcentaje de esta retención también estará basada en función al nivel de ingresos que tenga el trabajador, pero ¿Es este cálculo arbitrario? No, está estipulado bajo la tabla anual del IRPF publicada por el Ministerio de Hacienda.

Rendimientos por actividades económicas

Aquí nos referimos a  todos los ingresos por conceptos de las actividades profesionales de los trabajadores por cuenta propia. Aunque, en este punto debemos resaltar que esto vale sin distinción para cualquier persona que este inscrita en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) y gane dinero a través de su profesión.

¡Eso sí! Siempre hay que tener presente que existen un gran número de autónomos que no poseen ninguna sociedad instrumental; por lo que todos los gastos serán incluidos directamente en el IRPF.

Por otro lado, al calcular los rendimientos referentes a actividades económicas deben restarse todos aquellos gastos que sean deducibles. Ya que el resultado de estos es el que definirá la suma que debe pagarse, o por el contrario, la compensación correspondiente.

Los Rendimientos por Capitales Inmobiliarios

Estos se refieren directamente a las rentas por inmuebles, ya sean locales, comerciales e incluso garajes. Y básicamente la idea es que una propiedad inmobiliaria va a generar un determinado valor.

Ahora bien, para calcularlo debe comprobarse primero el  valor correspondiente a declarar y aplicarle una retención equivalente al 20%.

Eso si, a diferencia de otros casos de rendimientos, aquí no hay nada que compensar. Aunque sí que existen excepciones  como: Algún inquilino moroso o un ocupa que genere algún daño a la vivienda.

Ya que en esos casos, sí que puede haber una justificación por perdidas.

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Los Rendimientos de Capital Mobiliario

Estos se refieren a todos aquellos intereses generados a través de beneficios por acciones, fondos de inversiones, ahorros, instrumentos financieros e incluso derechos de imagen.

¿Cómo se calcula? Existe una política habitual para retener estos porcentajes, y se estipula que debe ser entre el 20% y el 24% en las ganancias de capital.

Eso sí, en estos casos no es descabellado pensar que la base será negativa. Y de ser así, no debería pagarse ningún impuesto en base a este concepto. Ahora bien, si hablamos de tiempos de bonanza, es común que entre inversiones de acciones y rendimientos de capital exista una cierta complejidad.

Las pérdidas o ganancias patrimoniales

Estas están representadas por todas las compras o ventas de algún inmueble o bien rustico. Y en función de cada uno de los casos los porcentajes podrían variar para mayor o menor.

Por ello, la suma debe ser establecida sobre el precio de origen. Y aunque lo normal es registrar ganancias, no se descarta la opción de que puedan existir perdidas. Ahora bien, al igual que otros casos, en este también existen excepciones como lo es la venta de una vivienda habitual a ciudadanos mayores de los 65 años.

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