Tasa de conversión: Todo lo que debes saber

Para todos aquellos que han trabajado en el extenso mundo del marketing no es un secreto que una estrategia o campaña requiere de una enorme creatividad. Y es que cada día la competencia a la que deben enfrentarse los negocios y empresas aumenta sin frenos.

Al mismo tiempo; entendemos que a medida que los años pasan se necesita de elementos más avanzados y novedosos para poder comprobar exitosamente la efectividad de todos nuestros esfuerzos.

Ahora bien; sin importar de que sea tu campaña, sabemos que el objetivo principal es alcanzar las metas planteadas. Y es justo en este particular donde la tasa de conversión se vuelve sumamente importante.

Por ello, hablaremos a continuación sobre que es la tasa de conversión, como puedes calcularla y todo lo que necesitas saber para manejar este indicador de forma correcta.

¿Qué es la tasa de conversión?

Se conoce como tasa de conversión a ese porcentaje de acciones que un usuario lleva a cabo, o aquella medición del impacto que ha tenido nuestro esfuerzo para que un usuario realice dichas acciones como: hacer clic en un enlace, llenar un formulario en línea, realizar una compra, entre muchas otras más.

O lo que es lo mismo; es el indicador o demostración de la relación que existe entre la cantidad de usuarios que visitan tu página; y el número que realiza una acción mientras lo hace.

Y ¿Esto de qué sirve? Muy sencillo; si tu tasa de conversión de conversión es alta, mayor será el éxito de tu campaña de marketing ¡Y claro! Esto es algo que todos queremos.

Por esto, si deseas hacer que tu negocio crezca con el marketing digital, debes llevar a cabo un  seguimiento de las conversiones dentro de tu campaña.  Pues, es la única forma en la que puedes afinar las estrategias de marketing.

¡Así es! Si quieres mejorar la eficiencia del contenido dentro de tu campaña; esta debe identificarse con el comportamiento de todos aquellos clientes que no completaron su compra.

Y es que solo entendiendo y mejorando este tipo de comportamientos, es que podrás convertir a muchos más visitantes en clientes de tu sitio web.

¿Cuáles son las principales llamadas de acción en la tasa de conversión?

Muy bien, ya que comprendes que la tasa de conversión es aquella que mide el número de usuarios que se han convertido en clientes. Así como también aquel porcentaje de visitantes que ha recibido tu web.

Pasemos a conocer las principales llamadas de acción a las que pueden responder los usuarios que te visitan, estas son:

• La apertura de correos electrónicos enviados por tu negocio.
• Todas las suscripciones a sorteos.
• La compra de productos.
• El relleno de formularios.

Ahora bien, una vez los visitantes de tu sitio se convierten el leads o clientes; debes registrarlos en tu Gestión de relaciones con los clientes; mejor conocida como CMR ¿Por qué razón? Esto va a permitirte dirigirte a tus clientes de una forma adecuada y sobre todo efectiva, mientras viajan por tu embudo de marketing.

¿Cómo calcular la tasa de conversión?

Una de las preguntas más recurrentes que rodean al tema de las tasas de conversiones es ¿Cómo calcularlas? Y aunque puedas creer que es algo complicado, es bastante sencillo a decir verdad.

Lo único que debe hacerse es tomarse por un lado el número de personas que interactúan con una pieza de contenido en particular. Y posteriormente, debes dividir el número de conversiones obtenidas entre el primer total.

O en otras palabras:

Número total de conversiones / número total de clics = Tu porcentaje de conversión.

Imagina entonces que enviaste una campaña de correo electrónico que anuncie el lanzamiento de tu nuevo producto a un número de 10.000 clientes que compraron anteriormente uno de tus productos.

Ahora bien, de los 10.000 correos enviados, 600 de ellos recibieron un clic para suscribirse al nuevo pedido. Esto significa que deben dividirse 600/10.000, y esto deja una tasa de conversión del 6%.

¿Cuál es el porcentaje que debe tener una buena tasa de conversión?

La tasa de conversión es un indicador claro de la efectividad de tu contenido ante tu audiencia. Por lo que si el 6 % de los visitantes de tu página web se suscriben o realizan compras, esto significa que tu sitio tiene una eficacia del 6 %.

Esta cifra es realmente positiva, ya que una tasa de conversión web ‘buena’ oscila entre el 2 % y el 5 % en la mayoría de los sectores.

Ahora bien, la tasa de conversión en marketing digital es específica y varía según el sector; algunos, como la industria de equipos, presentan un rendimiento web más bajo, mientras que otros, como la venta de electrónica o servicios empresariales, tienden a tener tasas de conversión medias más altas.

Por ello, es crucial realizar investigaciones para identificar áreas donde debes mejorar; y no enfocarte en comparar situaciones incomparables.

Cuál es la importancia de la tasa de conversión

La optimización de la tasa de conversión es un paso de suma importancia en cualquier estrategia de marketing ¿Por qué lo decimos? Te contamos más a fondo su importancia.

Lo primero es entender que: Evaluar la efectividad de tus estrategias de marketing;  implica comprender la respuesta que estas generan en tus visitantes.

Por ello, la tasa de conversión se vuelve fundamental en este tipo de análisis,  ya que se comparan las respuestas de los clientes con el total de contactos. Convirtiendola en una métrica precisa y altamente útil para medir el rendimiento.

Imagínenos por ejemplo que 40 personas se han suscrito a tu lista de correo durante el mes pasado. Es probable que el primer instinto que tengas sea celebrarlo y tomarte el día libre.

Sin embargo, gracias a la tasa de conversión has descubierto que esas 40 personas han salido de más de 40.000 que ha visitado tu página. Lo que significa que dicha tasa de conversión es del 1%; y eso solo indica una cosa ¡Debes ajustar el contenido pues es demasiado baja!

Así es, las tasas de conversión son indicadores clave para evaluar el éxito de tus estrategias de segmentación. Por esta razón, al comprender tu tasa de conversión puedes:

• Desarrollar campañas de marketing más efectivas tanto en redes sociales como en otros canales.
• Dirigirte a los usuarios de forma más específica ya que puedes separarlos en categorías, ubicación, intereses y otros criterios relevantes.

Las tasas de conversión y el ROI

Otro punto de gran valor es  comprender que una buena tasa de inversión implica a su vez tener un buen ROI también conocido como retorno de inversión.

Por esta razón, si gastas aproximadamente unos 2.000 dólares mensualmente en un contenido que te proporcione de vuelta 20.000 lectores y al menos 500 clics. Tendremos una tasa de conversión del 2,5%.

¿Qué significa esto? Que básicamente estarías gastando 4 Dólares en cada una de tus conversiones.

Ahora bien, si en el mes próximo consigues tener 800 clics; tu tasa de conversión sería del 4%. Por lo que si tu presupuesto sigue siendo de 2.000m dólares, cada una de las conversiones ahora te costarán 2.50 dólares, lo que significa que has mejorado sin la necesidad de aumentar tu gasto.

Sin embargo, si tu tasa de conversión disminuye, significa que tu ROI también disminuirá. Lo que se traduce en que cada una de tus conversiones será más costosa; y esto es una señal clara de que tu estrategia de marketing debe optimizarse o cambiarse en busca de una mejora.

Entonces ¿Cómo puedes mejorar tu tasa de conversión? Lo explicaremos a continuación.

¿Cómo mejorar exitosamente la tasa de conversión?

Es fundamental tener en cuenta que siempre existirá  margen para mejorar. Por ello, si buscas aumentar tu tasa de conversión, una opción es emplear la Optimización de la Tasa de Conversión CRO o Conversion Rate Optimization.

En términos simples, esto implica analizar las razones detrás de la falta de conversiones en tu sitio o contenido, y luego encontrar soluciones para abordar esos problemas.

Dicho esto, aquí tienes algunas estrategias para evaluar tu contenido y mejorar la tasa de conversión.

Prueba A – Prueba B

La gran mayoría de proyectos tipo CRO; llevan a cabo un proceso conocido como prueba A/B. Estos procesos también se conocen como pruebas de redirección o pruebas de cubo. Y se basan en comparar 2 o más versiones de un sitio web en busca de descubrir cuál de los 2 recibe más conversiones.

Te explicamos los pasos necesarios para llevar a cabo este proceso:

1. Selecciona el comportamiento de conversión que desees analizar: ¿Quieres medir las compras, las suscripciones a boletines o los clics en correos promocionales? Entonces es crucial enfocarse en una variable a la vez para obtener resultados precisos y comprensibles.
2. Identifica dónde se está perdiendo la atención de los visitantes: Aquí puedes utilizar herramientas como Google Analytics o pruebas de comportamiento de usuarios para este propósito.

¿Están abandonando los carritos de compra? ¿O ni siquiera llegan a esa etapa? Elabora una lista de posibles cambios para abordar el problema. Quizás necesites hacer el botón ‘Agregar al carrito’ más prominente o destacado.

3. Determina cuántos cambios quieres probar simultáneamente y cuál implementar primero: Para ello, puedes empezar con los cambios más simples o los que consideres que tendrán un impacto más significativo.
4. Utiliza una herramienta de prueba A/B: Con el objetivo de implementar los cambios y dirigir a los visitantes aleatoriamente hacia la versión original (control) o la variante.
5. Establece la duración del experimento: Todo esto siempre en función del tiempo necesario para obtener conversiones significativas. Si normalmente tardas una semana en obtener algunas conversiones, ejecuta la prueba durante un mes para asegurar resultados estadísticamente relevantes.
6. Analiza los resultados obtenidos: Si la variante muestra mejoras significativas, entonces ¡adóptala! En caso contrario, ajusta tu estrategia. Mientras que si hay dudas, lo mejor es que repitas la prueba. Ya que resultados ambiguos pueden indicar que la prueba A/B no ha acumulado suficientes datos para ser concluyente.

Este proceso puede ser repetido tantas veces necesites; ya que lo ideal es hacerlo hasta obtener la tasa de conversión a la que deseas llegar. Y para logarlo, existen numerosos elementos en un sitio web que pueden ser sometidos a pruebas, desde títulos y subtítulos hasta enlaces a redes sociales y botones de llamada a la acción.

Incluso, dentro de estas categorías existen diversas variables para probar, como lo son: tamaño o color de la tipografía, posición del botón, tonalidad del fondo, entre muchos otros elementos.

Pruebas a gran escala vs pruebas a pequeña escala

Los ajustes que decidas experimentar en tu web pueden variar desde un rediseño completo de la página hasta cambios mínimos, como por ejemplo utilizar una tipografía diferente para el botón de llamada a la acción.

La elección es tuya, pero considera siempre que al realizar múltiples cambios simultáneamente, se vuelve más complejo identificar cuáles de estos cambios generan un verdadero impacto.

Ahora bien, imaginemos que tu sitio web tiene una tasa de conversión del 1 %, ¿deberías optar por una revisión completa o solo realizar modificaciones menores? Te contamos más al respecto.

Revisión completa

En la revisión completa se requiere de tiempo y dinero para desarrollar una página destino totalmente nueva y con funciones novedosas. Por lo que los gráficos, textos de tipografía y cualquier elemento presente será nuevo y buscará mejorar tu tasa de conversión.

Pros:

Generalmente en esta revisión se obtiene un aumento de hasta un 200% en las conversiones; con solo 1 ronda de prueba.

Contras:

No se puede descartar la posibilidad de que podrías haber obtenido los mismos resultados realizando un par de modificaciones sencillas. Por ello, en este punto debes decidir si quieres ejecutar más pruebas en busca de una mejoría, o empezar todo desde 0.

Modificaciones menores:

En este paso como mencionamos anteriormente puedes realizar pequeños cambios antes de realizar cualquier tipo de inversión. Ubica la opción “suscribirse a nuestra lista de correo electrónico” en otro lugar; haz que los programadores la hagan siempre visible, y lleva a cabo cualquier cambio menor que aumente tu tasa de conversión web a ese 3% que se busca.

Pros:

Es un gasto mucho menor a empezar un sitio web totalmente nuevo.

Contras:

Realizar una tanda de pruebas múltiples puede que conlleve demasiado tiempo. Aunque todo depende que cuando dediques a cada una de las variaciones en busca de resultados.

Por último, solo queda recordar que solo tienes una oportunidad para causar una impresión positiva. Ya que es justamente esta impresión la que hace la diferencia entre ganar o perder un cliente.

Así que debes hacer todo lo que esté a tu alcance para tener una web lo más optimizada posible.

Por ello, siempre mantén en orden la tasa de conversión, ya que aumentarla no solo va a mejorar tus resultados, sino que te servirá para predecir de forma más profunda el comportamiento de tus clientes.